martes, 31 de agosto de 2010

La poesía y los imbéciles

La poesía y los imbéciles


Aldo Pellegrini
[Publicado en Poesía Nº 9, agosto de 1961]

 
La poesía tiene una puerta herméticamente cerrada para los imbéciles, abierta de par en par para los inocentes. No es una puerta cerrada con llave o con cerrojo, pero su estructura es tal que, por más esfuerzos que hagan los imbéciles, no pueden abrirla, mientras cede a la sola presencia de los inocentes. Nada hay más opuesto a la imbecilidad que la inocencia. La característica del imbécil es su aspiración sistemática de cierto orden de poder. El inocente, en cambio, se niega a ejercer el poder porque los tiene todos.

Por supuesto, es el pueblo el poseedor potencial de la suprema actitud poética: la inocencia. Y en el pueblo, aquellos que sienten la coerción del poder como un dolor. El inocente, conscientemente o no, se mueve en un mundo de valores (el amor, en primer término), el imbécil se mueve en un mundo en el cual el único valor está dado por el ejercicio del poder.

Los imbéciles buscan el poder en cualquier forma de autoridad: el dinero en primer término, y toda la estructura del estado, desde el poder de los gobernantes hasta el microscópico, pero corrosivo y siniestro poder de los burócratas, desde el poder de la iglesia hasta el poder del periodismo, desde el poder de los banqueros hasta el poder que dan las leyes. Toda esa suma de poder está organizada contra la poesía.

Como la poesía significa libertad, significa afirmación del hombre auténtico, del hombre que intenta realizarse, indudablemente tiene cierto prestigio ante los imbéciles. Es ese mundo falsificado y artificial que ellos construyen, los imbéciles necesitan artículos de lujo: cortinados, bibelots, joyería, y algo así como la poesía. En esa poesía que ellos usan, la palabra y la imagen se convierten en elementos decorativos, y de ese modo se destruye su poder de incandescencia. Así se crea la llamada "poesía oficial", poesía de lentejuelas, poesía que suena a hueco.

La poesía no es más que esa violenta necesidad de afirmar su ser que impulsa al hombre. Se opone a la voluntad de no ser que guía a las multitudes domesticadas, y se opone a la voluntad de ser en los otros que se manifiesta en quienes ejercen el poder.

Los imbéciles viven en un mundo artificial y falso: basados en el poder que se puede ejercer sobre otros, niegan la rotunda realidad de lo humano, a la que sustituyen por esquemas huecos. El mundo del poder es un mundo vacío de sentido, fuera de la realidad. El poeta busca en la palabra no un modo de expresarse sino un modo de participar en la realidad misma. Recurre a la palabra, pero busca en ella su valor originario, la magia del momento de la creación del verbo, momento en que no era un signo, sino parte de la realidad misma. El poeta mediante el verbo no expresa la realidad sino participa de ella misma.

La puerta de la poesía no tiene llave ni cerrojo: se defiende por su calidad de incandescencia. Sólo los inocentes, que tiene el hábito del fuego purificador, que tienen dedos ardientes, pueden abrir esa puerta y por ella penetran en la realidad.

La poesía pretende cumplir la tarea de que este mundo no sea sólo habitable para los imbéciles.

De taquito

jueves, 26 de agosto de 2010

Que se venga...

Ciprés Ediciones invita a la presentación del libro de Nicolás Filipacópulos, "Se va el verano (o que se vaya)"; el próximo Viernes 27 de agosto, en La Fábrica Centro Cultural (Caseros 988), desde las 20 horas.


"A través de esta suerte de tangos posmodernos, Nicolás Filipacópulos nos acerca a un mundo en el que reverberan los tópicos del género rioplatense. Los poemas nos presentan a un antihéroe cautivo de una variedad de excesos, de lugares y de música que se convierten en vitales barricadas para resistir las embestidas de mujeres de colmillos afilados. Ciclotímicas, fantasmales, mujeres de humo, intocables; parecen sonreírle eternamente desde un verano que jamás termina. ‘Se va el verano (o que se vaya)’ apuesta a la ironía; quizás como revancha o amparo, caminar descalzo por el invierno de una playa, contra la orfandad de la más insalvable soledad."

sábado, 21 de agosto de 2010

Lírica tóxica

Hechizo


No debiste mirarme así,
Sabrás lo difícil que es
escapar de ahí, ¿o no?

A veces pienso que el mutismo
es una solución elegante,
sin embargo, te chamuyo.

No debiste aferrarte a mí.
El candor de tu mirada
me dejó sin palabras.

jueves, 12 de agosto de 2010

Nano trae mandarinas

Estimados,

Les adjunto un libro de cuentos y relatos cortos que hice junto con Natalia Tescione (dibujos) y Máximo Coeli (Diseño).

Como no hay mejor presentación de un libro que el libro mismo, lo pueden leer y descargar online desde la página: http://www.mandarinasdeabril.com.ar/
Son todos cuentos -bien cortos- como para leer en 5 minutos.

El 18 de septiembre lo vamos a presentar en el cabildo para la feria del libro y paralelamente el 18 y 19 en la feria de Libros Son el la Plaza de la Intendencia. Ahi van a haber a la venta 200 libros impresos de manera casera con tapas de cartón.

Si les gusta y lo reenvían yo me pongo contento.

Abrazon y muchas gracias,

Nano

http://www.mandarinasdeabril.com.ar/
http://www.quenodecaiga.wordpress.com/

viernes, 6 de agosto de 2010

6 de agosto

Roque Dalton

Después de la bomba atómica


Polvo serán, mas, ¿polvo enamorado?







De: Taberna y otros lugares